Renault ha desvelado para el mercado una edición especial del Mégane R.S., el llamado Ultime. Como su nombre indica, será el Mégane R.S. final con el que concluyen unos veinte años de versiones deportivas del adorado modelo del segmento C. Un coche muy relacionado con las carreras, tanto en circuitos a través de diferentes certámenes como en los rallyes con los míticos Mégane Maxi Kit Car de finales de los noventa (coche que le dió a la marca el título del Mundial de Rallyes F2 en 1999). Es un coche muy de circuitos con mayor equipamiento de serie que los Mégane R.S. vistos hasta ahora.
Y es que no sólo es la despedida del Mégane dentro del repertorio que tiene Renault Sport, sino la despedida de Renault Sport como departamento deportivo de la marca del rombo. Este rol lo asumirá Alpine de ahora en adelante como parte de la estrategia de reestructuración del Grupo Renault para los próximos 10-15 años.
Renault Sport cierra de esta manera una historia de 47 años de vida en los que ha conquistado toda clase de territorios, incluyendo la Fórmula 1 o diferentes competiciones de turismos. Atrás quedan grandes recuerdos como los Renault Laguna del británico de turismos, los Renault F1 amarillos de los ochenta, los Williams Renault de los noventa o la gran era junto a Fernando Alonso, siendo Renault quien al fin batió al gran binomio Ferrari/Michael Schumacher en 2005 y 2006.
Este Renault Mégane R.S. Ultime estará limitado a 1.976 unidades – y no es casualidad dado que Renault Sport tal como la hemos conocido hasta ahora se fundó en 1976. El modelo final de Renault Sport se ha presentado en el Salón de Tokio el 13 de enero. Estará disponible en los siguientes colores: Negro Brillante, Blanco Nacarado, Amarillo Racing y Naranja Tonic.
Mecánica
Es una serie especial basada en el Mégane R.S. Trophy, manteniendo el mismo motor turbo de cuatro cilindros que entrega unos 300 caballos de potencia y 420 Nm de par motor. El propulsor está acoplado a una caja de cambios automática de doble embrague EDC y a un diferencial mecánico Torsen. Según cifras oficiales es capaz de pasar de 0 a 100 en 5,7 segundos. Como detalles de interés, las aletas delanteras son 60 milímetros más anchas que en el modelo normal mientras que las traseras también se ensanchan en unos 45 milímetros, dándole una apariencia más musculosa.
Otras bondades con las que cuenta el Mégane R.S. Ultime son frenos Brembo bimaterial, asientos Recaro y otros detalles que ya estaban en el Trophy. Estos son la pantalla de 9,3 pulgadas, el sistema de sonido Bose, el cuadro de mandos digital de 10 pulgadas, control de crucero adaptativo y ayudas al aparcamiento. Para cuando se saque a circuito, el Mégane R.S Ultime cuenta con aplicación de telemetría y una muy interesante dirección a las cuatro ruedas, llamado 4Control.
Y es que, con la llegada del Renault Mégane R.S. Ultime este mes de febrero, también reemplazará en el catálogo de Renault Sport al Mégane R.S y al Mégane R.S. Trophy. Una conmemoración del adiós de un departamento que logró grandes éxitos tanto en la calle como en competición. De hecho, a día de hoy siguen viéndose muchas de sus creaciones en tandas y concentraciones por muchas partes del mundo, tanto en la calle como en los circuitos.
