Mecánica
Volviendo en concreto a este Singer DLS Turbo, lo que hace Singer de entrada es partir de un Porsche 911 de la generación 964, los fabricados entre 1989 y 1994 – una actualización de los 930 que se fabricaron entre 1975 y 1989 y un puente hacia los mucho más modernos 993, los últimos refrigerados por aire. Este DLS Turbo no se basa estéticamente en el 964, sino en un 930 muy especial. En concreto, en el 934/5, una variante de competición que arrasó en la temporada 1977 de la SCCA Trans American Series, un híbrido entre el 934 y el 935 – el chasis del 934 y neumáticos, alerón trasero y llantas del monstruoso e icónico 935 ‘Moby Dick‘, además de un tremendo turbo para competir en el Grupo 4 – acabaron ganando seis de las ocho carreras de aquel año. Corrió en la SCCA porque la IMSA lo prohibió antes incluso de su debut en competición.
Al motor 3.8 seis cilindros plano se le colocan dos turbocompresores con válvulas de descarga controladas electrónicamente, un intercooler de aire a agua y unos ventiladores montados en posición horizontal. Previamente, el motor se desmonta por completo y se restaura con componentes de alto rendimiento, utilizando tecnología proveniente de la competición. Gracias a esto, el Singer DLS Turbo es capaz de dar la potencia de 700 caballos a más de 9.000 revoluciones por minuto, unas cifras atronadoras para un coche que ya de por sí lo era en su momento. El motor va unido a una caja de cambios manual de seis velocidades como única opción, además de montar frenos de cerámica de carbono y pinzas de freno aligeradas pensándose tanto para su uso por carretera como para rodar en circuitos.
También se actualizan los neumáticos, utilizando unos Michelin Pilot Sport Cup 2 o los Cup 2R, según los gustos del cliente, con llantas de 19 pulgadas en el eje delantero y de 20 en el trasero. Por supuesto, las llantas son también aligeradas de magnesio forjado con un solo tornillo central en lugar de cuatro o cinco como las ruedas de coches convencionales: de esta manera, se reduce la masa rotacional.
¿Qué puedo modificar de mi Singer DLS Turbo?
En primer lugar, el agraciado de la vida que tenga un 964 y el presupuesto para convertirlo a un Singer DLS Turbo ha de tener claro si quiere un coche para rodar por carretera o un coche para circuitos. Para centrarse en su uso en carretera se ha desarrollado la variante con cola de pato y el spoiler delantero que reduce el drag dado que no se necesita tanta carga aerodinámica en carreteras convencionales…se supone. El de circuitos, en cambio, monta un gran alerón trasero que recuerda a las unidades de carreras de Kremer Racing así como un splitter delantero mucho más pronunciado para aumentar la carga.
¿Y si quieres los dos en un solo coche? Pues no hay problema. Tanto el splitter como el alerón trasero se pueden montar y desmontar de manera individual, de modo que cada cliente lo puede configurar como quiera o adaptarlo para diferentes momentos. El acabado de la pintura exterior también se puede escoger de manera libre de acuerdo a sus preferencias personales.
Del mismo modo, también los acabados y materiales del interior, empezando por elementos que pueden estar acabados en cuero por ejemplo, se pueden escoger de manera personal, de modo que cada Singer DLS Turbo – y, por extensión, cualquier personalización de su catálogo. Se trata de un servicio especializado, que va más allá de los configuradores de marcas generalistas y de una personalización más similar al de estudios de marcas más lujosas y prestigiosas.