Volkswagen adelanta el nuevo Golf R en la Ice Race 2024

Hans-Joachim Stuck y Johan Kristoffersson llevaron un Golf R camuflado además de Golf históricos de rallyes

A finales de enero tuvo lugar una nueva edición de la Ice Race in Zell am See, evento sobre nieve en Austria en el cual se patina y esquía con todo tipo de coches. Un evento espectacular en el que varias marcas, tanto alemanas como de otras partes del mundo, suelen hacer acto de presencia para deleitar a los fans – evento en el que estuvo de hecho Álvaro Couso/9Republic, uno de los invitados más recientes al PodCars de Cars & Pizza Club. Volkswagen no se quiso perder la ocasión y para ello llevó varios Golf históricos de rallyes, siendo 2024 el año en el que se cumplen 50 años del lanzamiento del modelo original. Y, junto a los Golf históricos, uno que en teoría marcará el medio siglo de vida: el lanzamiento del nuevo Golf R, pudiendo verse una unidad camuflada sobre la nieve austríaca.

Cada año, este evento de FAT International atrae a diferentes personalidades: sin ir más lejos, en la edición de 2022, meses estuvo presente nada menos que Max Verstappen, meses después de haber conseguido su primer título mundial en aquel agónico Abu Dabi 2021. Verstappen sacó el RB8 de 2012 – que aún utilizaba motores V8 atmosféricos con su sonido mucho más espectacular, algo habitual para exhibiciones – compartiendo pista con el ex campeón europeo de carreras sobre hielo Franky Zorn, este a lomos de su moto. Como dato de interés, este fue el primer evento en el que Verstappen lució el número 1 en su monoplaza, algo que se sigue manteniendo a día de hoy tras sus dominantes temporadas 2022 y 2023 junto a Red Bull Racing y Honda.

La relación de FAT International con el motorsport viene desde sus inicios, siendo una empresa cuyo fundador es nada menos que Ferdi Porsche. Un día, él recordó las carreras sobre hielo, con neumáticos de clavos, que se hacían en Zell am See entre los cincuenta y los setenta, incluyendo gente esquiando detrás de los coches. FAT International también ha estado presente en el motorsport, patrocinando por ejemplo el Dauer 962 que arrasó en las 24 Horas de Le Mans en 1994 – un coche de Grupo C reconvertido a coche de calle para después convertirlo a GT1.

Así pues, en 2019 se ‘reinventó’ la Ice Race, al principio disputándose en un lago helado como en los viejos tiempos, aunque tras dos años exitosos, la pandemia y todos sus efectos secundarios complicaron las cosas. Desde entonces, en vez de sobre un lago helado se disputa sobre un circuito específico de nieve. Es más una pachanga que una carrera, aunque hay competición en sí en la que se admite casi de todo. Para inscribirse, lo único que hace falta son neumáticos de clavos y la organización decide después los coches y pilotos que participarán en el evento, buscando los más espectaculares y especiales.

El Volkswagen Golf R 2024 en la Ice Race

Volkswagen vino con muchos detalles para los fans, al igual que Audi, también parte del Grupo Volkswagen. De entrada, trajo a dos grandes pilotos de dos eras muy diferentes. Por un lado estaba Hans-Joachim Stuck, el legendario alemán que pasó por la Fórmula 2 y Fórmula 1 en la época de los setenta para convertirse en uno de los grandes pilotos de Porsche en la resistencia con los Porsche 962C, logrando dos victorias en Le Mans en 1986 y 1987 y cinco podios, además de ser campeón mundial en 1985. También fue campeón del DTM en 1990 y, a principios de su carrera deportiva, se hizo notorio por haber ganado las 24 Horas de Spa. Trece años después de su retirada como piloto sigue siendo embajador del Grupo Volkswagen, deleitando a los fans de todo el mundo con toda clase de coches.

El otro es todo un gigante: el seis veces campeón mundial de rallycross Johan Kristoffersson. El sueco (de casi dos metros de altura, similar a Stuck) ha ganado cinco de sus seis títulos mundiales a los mandos de máquinas de Volkswagen (la única excepción fue en 2020 cuando lo hizo con Audi junto a EKS, equipo de Mattias Ekström). Un piloto de lo más competitivo que también ha participado en rallyes y fue piloto Volkswagen en el WTCR durante 2019, además de haber logrado varios títulos en Extreme E.

Pero vayamos al grano: el Golf R. Coincidiendo con el año del 50º aniversario, Volkswagen ha querido darle a los fans (muchos de sus clientes vendrán además del centro de Europa, si bien también los habrá en una España donde el Golf ha sido durante muchos años el coche más vendido) un anticipo del Golf R, la versión más potente que se sitúa incluso por encima del Golf GTI. Este también ha sido anticipado a principios de este año, en su caso en el CES Las Vegas 2024 este mismo mes de enero. También han anticipado los Golf eHybrid y Golf GTE (variante eléctrica) aún pendientes de su comercialización y llegada a los concesionarios…pero son el Golf GTI y, especialmente, el Golf R lo que más nos interesa en este caso.

Se espera que el Volkswagen Golf R cuente una vez más con el motor 2.0 TFSI turboalimentado que entregue al menos 315 caballos de potencia (frente a los 288 del anterior), transmitiéndose a las cuatro ruedas – una tradición que comenzó hace más de veinte años con el Golf R32 de la cuarta generación. Un hot hatch con mucha tecnología (tanto por el sistema de infoentretenimiento como por todo el sistema de pantalla táctil) y capaz de ir muy, muy rápido. Cuando haya ganas de derrapar, (y una situación segura para ello), el modo Drift envía gran parte de la potencia hacia las ruedas traseras, aunque la electrónica va a tratar de ‘sujetar’ el coche de modo que no estará desbocado del todo en ningún momento en condiciones normales.

En el caso del Golf GTI, Volkswagen ya ha mostrado una pantalla táctil más grande que la del GTI actual (12,9 pulgadas frente a 10), revisión del sistema de infoentretenimiento y comandos por voz, lo cual también deberían estar en el Golf R. También contará con un 2.0 turbo de cuatro cilindros, si bien en este caso dará unos 262 caballos, unos 20 más que en el modelo actual. Para los puristas hay una pequeña mala noticia, pues el GTI sólo contará con una caja de cambios automática de siete marchas y doble embrague, diciendo adiós a la manual de seis marchas que teníamos hasta ahora. En el Golf R se ofrece tanto esta caja de cambios automática de siete marchas como la manual de seis velocidades, siendo esta la que viene de serie y la automática como opcional.

Aparte del modo Drift ya mencionado, el Golf R contará con otros modos de conducción como Confort, Race, Sport, Special o Individual, pudiéndose cambiar pulsando el botón R en el volante. El diámetro de los frenos delanteros también crece con respecto al Golf R anterior – Volkswagen ofrece además un pack Performance que añade más modos de conducción, además de algunos detalles estéticos y otras opciones de equipamiento.

La Ice Race es todo un espectáculo. Otros conductores necesitarían poner las cadenas de nieve en estas condiciones, pero para nuestros pilotos de competición es el momento en el que comienza la diversión. En la Ice Race te encuentras con verdaderos aficionados al automovilismo y también con muchas personas que, de otro modo, tendrían poco contacto con el deporte del motor, pero que vuelven a casa con un gran entusiasmo por él”, comentó Hans-Joaquim Stuck hablando sobre la Ice Race.

Me encanta conducir coches potentes con tracción total sobre hielo y nieve, especialmente si es un modelo R. Fue muy divertido sentarse por primera vez en el flamante Golf. Solo puedo decir que, aunque el Golf R no ha sido presentado, debajo del camuflaje hay un verdadero coche deportivo que los seguidores de la marca R van a desear”, afirmó Kristoffersson, quien pudo probar el coche y hacer manos con el mismo antes de comenzar su temporada en el Mundial de Rallycross, donde se espera que siga con los Polo RX1e.

Por otro lado, desde Audi trajeron dos coches muy diferentes. Uno de ellos es el mítico Audi Quattro A2 con el que conquistaron el Mundial de Rallyes y básicamente cambiaron la categoría por completo, instaurando la tracción a las cuatro ruedas como la forma de ser competitivos. El otro, haciéndose hueco dentro del apartado de coches eléctricos, es el Audi S1 e-tron quattro Hoonitron, el prototipo eléctrico creado con la imagen del S1 Sport Quattro E2 en mente. Este mismo coche es el que llevó el desaparecido Ken Block en sus últimas Gymkhanas en 2022 antes de su fallecimiento – precisamente también sobre la nieve, en este caso en Utah.